A la orilla del mar hay unas aves y están allí en todo tiempo bajo el ardiente sol, la fuerte lluvia, o el fuerte frío si alguien se acerca con comida en su mano ellas se emocionan  y si levantas la mano con comida esas aves se lanzan a sacar la comida de sus manos si es posible aunque tengan que pegar unos cuantos picotazos, aletazos y aruñadas ellas lo harán con violencia.

A esa acción se le llama arrebatar, como las gaviotas arrebatan, así debe ser el creyente y todo aquel a quien se le dé la oportunidad de oír la palabra de Dios, Jesús dijo en Marcos 4:15  Y éstos son los de junto al camino: en quienes se siembra la palabra, pero después que la oyen, en seguida viene Satanás, y quita la palabra que se sembró en sus corazones. Dice que no se las pide por favor, sino que se las quita, quitarle algo a alguien significa a como dé lugar si tiene que usar exceso de fuerza lo va hacer y lo logrará a las buenas o las malas, bueno este es Satanás. Pero el también arrebata o sea que no está jugando.

Y de la misma manera los violentos arrebatan el reino, cuando la oportunidad está puesta delante de ellos.

No estamos hablando de una violencia física, sino espiritual. No es como en los tiempos de Noé, ni como la violencia que se ve entre los cárteles del narco terrorismo.

Cuando Cristo limpió el templo aunque uso un azote, nadie estaba herido, (sino solamente el orgullo de los fariseos).

Y nosotros también debemos de ser violentos del espíritu, en tres áreas: La Verdad, La Santidad y  El Reino De Dios.

1. La Verdad. Oseas 4:6

Es peligroso vivir como un ignorante. Hay cristianos que aun con tiempo caminando con el Señor, preguntan cómo Pilato, ¿Qué es la verdad? Juan 18:38

En la Biblia, un conocimiento de la verdad es sumamente importante. Es que en nuestros días la verdad está atacada por todos lados.

2. La Santidad.

En la Biblia, habla claro que tenemos que vivir en contra del pecado que aparece en nuestras vidas.

Marcos 9:43-44 donde el gusano de ellos no muere, y el fuego nunca se apaga

3. El Reino De Dios.

Si estamos realmente tomando el reino, y no solamente jugando con el aparentar, tenemos que tomar el reino con violencia.

Acaso Pablo no nos enseñó cómo vivir contentos cualquiera que sea nuestra situación
4:13 Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.

Qué bueno ver los jóvenes sirviendo en la iglesia dando las primicias de su existencia al Señor. Aprendiendo a trabajar en equipo, y bajo la enseñanza de un ministerio poderos del Evangelio, que los exhorta siempre a hacer algo por su Señor.

Pero si los inmigrantes pueden luchar tanto, con un espíritu determinado, para una vida mejor, ¿cuánto más debemos nosotros de vivir en un espíritu violento para el reino de Dios, arrebatando lo de Dios, como las gaviotas que mencioné antes.

Los inmigrantes vienen para una bendición temporal, pero nosotros, en el reino de Dios, por una bendición eterna, que sí es un paraíso. Lc. 23:43

Cuán fácil, es ir al infierno sin esforzarse por nada, simplemente hacer lo que es natural. Después de toda esa lluvia, hay peces muertos que ya son llevados al mar, para ser comidos de las gaviotas. Los peces muertos están llevados por la corriente, pero los peces vivos luchan en contra de la corriente.

Esforzaos a entrar, por la puerta angosta, porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán. Lucas 13:24

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Ana Fonseca

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